Un estudio biomecánico es una evaluación exhaustiva que analiza la forma en que el cuerpo humano se mueve y funciona. Este proceso utiliza herramientas avanzadas, como cámaras de alta velocidad, sensores y software especializado, para medir y comprender cómo interactúan los diferentes sistemas musculoesqueléticos durante el movimiento. Desde la marcha hasta la actividad deportiva, un estudio biomecánico proporciona información detallada sobre la postura, el equilibrio, la fuerza muscular y la distribución de la carga, lo que permite identificar patrones de movimiento óptimos, prevenir lesiones y mejorar el rendimiento físico.

Un estudio biomecánico está dirigido a una amplia gama de personas interesadas en comprender mejor el funcionamiento de su cuerpo durante el movimiento. Esto incluye a atletas de diferentes disciplinas que desean mejorar su rendimiento, personas con lesiones o condiciones médicas que afectan su movilidad, así como a profesionales de la salud, como fisioterapeutas, médicos deportivos o entrenadores, que buscan evaluar y optimizar el movimiento de sus pacientes o deportistas. También puede ser beneficioso para aquellos que buscan prevenir lesiones, mejorar su postura o simplemente maximizar su salud y bienestar físico.